Su derecho a tener una vivienda de alquiler segura y saludable
Los propietarios tienen que proporcionar un hogar seguro y saludable a sus inquilinos. Los inquilinos tienen que hacer ciertas cosas para mantener sus hogares seguros y saludables.
Lo que los propietarios tienen que hacer.
La ley de Oregón dice que el propietario tiene que mantener su unidad de alquiler y todas las áreas comunes seguras y en buen estado de funcionamiento cuando usted se muda a la unidad y mientras vive allí. (Vea la ley de Oregón ORS 90.320).
Esto significa que el propietario tiene que mantener su unidad de alquiler limpia y en buen estado de funcionamiento cuando usted se muda.
El propietario también tiene que proporcionar:
- protección climática y contra el agua (no es necesario un aislamiento completo);
- sistemas de plomería y alcantarillado que funcionan correctamente;
- agua potable segura;
- agua corriente fría y caliente segura en todos los grifos y electrodomésticos;
- calefacción que funciona adecuadamente;
- alumbrado eléctrico y cableado seguro;
- electrodomésticos, si el propietario los proporciona, que funcionan bien;
- ascensores y otros equipos en buen estado de funcionamiento, si el propietario los proporciona;
- llaves y cerraduras para todas las puertas externas que funcionan bien;
- cerrojos para todas las ventanas que se pueden abrir;
- recipientes para la basura y servicio de recolección de residuos, a menos que el propietario y el inquilino tengan un acuerdo escrito distinto o su municipalidad no lo requiera;
- paredes, pisos, cielorrasos, escaleras y pasamanos en buen estado;
- áreas comunes que son seguras para el uso que se les da típicamente;
- detectores de humo que funcionan en el momento en que se muda (pero los inquilinos son responsables por cambiar las baterías); y
- detectores de monóxido de carbono (CO) si su unidad está conectada a una fuente de CO a través de un ventilete o puerta (pero los inquilinos son responsables por cambiar las baterías).
El propietario tiene que mantener las unidades de alquiler y las áreas comunes libres de:
- peligros de incendio; y
- basura, roedores y plagas.
Un propietario tiene que pagar por el servicio de control de plagas en las áreas comunes (por ejemplo, una sala de lavandería, un vestíbulo o un área de almacén). Usted tiene que pagar por el control de plagas en su vivienda a menos que pueda demostrar que no es responsable por ellas o ya estaban allí cuando se mudó.
Lo que los inquilinos tienen que hacer.
Usted tiene que:
- usar su vivienda de alquiler y los electrodomésticos de la manera prevista para ese espacio;
- mantener su vivienda limpia y prolija, incluyendo dentro de su vivienda, el patio, el porche o áreas externas privada;
- mantener sus áreas libres de:
- basura o desorden; y
- de todo lo que pueda atraer plagas, como ratas, ratones, cucarachas.
- mantener la cocina limpia, poner los alimentos en recipientes y sacar la basura con regularidad;
- no traer nada que esté infestado con plagas. Los muebles o ropas usadas podrían tener ácaros. Si usted causa un problema de plagas, tiene que pagar por un exterminador;
- mantener los fregaderos, inodoros, duchas y tinas lo más limpias posible;
- limpiar después de que cualquier mascota o animal de asistencia haya hecho sus necesidades;
- no hacer ruido que perturbe a los vecinos u otros inquilinos;
- probar los detectores de humo y monóxido de carbono cada seis meses. Cambie las baterías cuando sea necesario. No quite ni altere ningún detector o alarma;
- no dañar, destruir o quitar cualquier parte de la vivienda de alquiler a propósito o por descuido.
- Si usted, sus hijos o huéspedes rompen o dañan algo en su vivienda, informe al propietario de inmediato. Explique lo que sucedió. El propietario tiene que arreglarlo. Pero usted quizás tenga que pagar por todo o parte del costo del arreglo. En ese caso, pida ver las facturas o recibos antes de pagar.
- Excepción para víctimas de abuso. Si puede probar que usted fue víctima de violencia en el hogar, violencia en relaciones sentimentales, acecho o agresión sexual, no tiene que pagar el daño causado por el abusador. Una prueba puede ser:
- orden de restricción u orden de protección firmada por un juez,
- el antecedente judicial del abusador que muestra una condena por violencia en el hogar, violencia en relaciones sentimentales, acecho o agresión sexual,
- un informe policial sobre violencia en el hogar, violencia en relaciones sentimentales, acecho o agresión sexual, o
- una declaración firmada por una persona calificada que dice que usted fue víctima de abuso en los últimos 90 días. Puede pedirle a un oficial de policía, abogado, profesional médico certificado o proveedor de servicios a las víctimas que le dé esta declaración.